Breve historia de la podología

La palabra podología viene del griego ποδο-, podo: ‘pie’, y -λογία, -logía, ‘estudio’. Por tanto, por su etimología es el estudio del pie. Una vez sabido esto, metámonos en profundidad en lo que realmente significa y su origen. 

Muchos de los pacientes que acuden a consulta les inquieta de cómo era el cuidado de los pies en nuestros origenes, pues bien, dentro de lo que quedó registrado, tenemos constancia que ya en el antiguo Egipto tenían cuidado de los pies, los faraones tenian sus propios sirvientes que se dedicaban exclusivamente a sus pies. Y en momias se han encontrado pies muy bien cuidados con ausencia de callosidades. Incluso hay constancia que diseñaron alguna prótesis de madera con una malla de sujeción para el primer dedo. 

Prótesis primer dedo. Imagen extraída de National Geographic - Historia

  

  

En el imperio romano también hay constancia que tras sus baños cuidaban sus pies.  

En la edad media, ya se destaca la presencia de cirujanos (cirujano-barbero), que se dedicaban a retirar desde callos a muelas, también trataban úlceras y fracturas. 

Cirujano-barbero. Imagen extraída de Wall Street International Magazine - Ciencia y Tecnología

En España, los Reyes Católicos se dedican a regular las profesiones sanitarias, dividiendolas en médico, cirujano y barbero (que es la figura más cercana al podólogo actual), al cual más adelante se obliga a realizar estudios de anatomía y disección. Y en ese momento, se destaca la figura del cirujano practicante que realiza estás pequeñas intervenciones que antes hacia el médico. Con varias ediciones del manual quirúrgico de cirugía menor. Trataba de la cirugía menor como nicho tradicional de los cirujanos de menor categoría, y la Anatomía como materia de conocimientos teóricos básicos para la formación de un sanitario eminentemente técnico y quirúrgico. 

Posiciones del bisturí quirúrgico (en el manual del cirujano practicante). Imagen extraída de Revista de Historia de la Medicina y de la Ciencia

Una vez pasadas estas etapas, ya nos vamos a la época contemporánea, en la cual encontramos que el podólogo ha pasado de callista a ATS (ayudante técnico sanitario) con especialidad de podología. En este momento el podólogo ya es capaz de con plena autonomía tratar al paciente sin sobrepasar el límite de la cirugía menor. Ya en 1988, se crea la titulación Diplomado Universitario en Podología, y al ser una diplomatura no depende de ningún otro estudio. Por último, en 2009 se consigue el Grado en Podología, que actualmente está vigente, y seguir con un Máster Oficial para poder continuar con estudios de Doctorado. 

Nuestra situación actual, tal y como encontramos en Wikipedia: "En España es junto a la odontología una de las dos ramas médico-sanitarias que no requieren estudios previos en medicina ni en enfermería, como se requería hasta hace unas décadas, antes de aplicarse las directrices de la Unión Europea. Con la actual implementación del Plan Bolonia los estudios universitarios de podología es de grado universitario."

Y tal y como define el Colegio General de Colegios Oficiales de Podólogos de España: "Los podólogos son los profesionales de la salud que pueden recibirte directamente en su consulta, que pueden diagnosticar, tratar y prevenir las afecciones y alteraciones derivadas de las extremidades inferiores, sin que te deriven a ellos otros especialistas. El podólogo está capacitado para prescribir fármacos y realizar desde tratamientos conservadores a intervenciones quirúrgicas con las últimas tecnologías."

Realización de vendaje neuromuscular para fascitis plantar. Imagen extraída de Diario Económico del Negocio de la Salud - PlantaDoce 

                                                                                                                                                     

Realización de anestesia local para el primer dedo. Imagen extraída de https://www.sarrocapodologos.es/ (Sarroca Clínica - Zaragoza)